¿Cómo hacer que tu equipo supere la depresión post vacacional?

El lunes de esta misma semana, exactamente el día de septiembre, un amigo me enviaba en una foto de WhatsApp una frase que decía:

“Qué largo se me está haciendo septiembre…”

¿Te encaja esta frase? A mí me arrancó una sonrisa pero me conectó con que muchas veces las vueltas a la rutina nos crean ciertas dificultades por lo que pensé que este post te podría ser de utilidad para hacer la vida más fácil a tu equipo de trabajo. 

Es muy probable que parte de tu gente sienta de manera más o menos intensa ese término de “Depresión postvacacional”. ¿Tú lo has sentido alguna vez? Me atrevería a decir que todos aquellos que disfrutan en verano de más de una semana de vacaciones pueden llegar a sentirlo. Realmente hay una forma de no sentirlo…pero igual no te gusta demasiado la idea: ¡No tener vacaciones! ¡Jajaja! Fuera de bromas, los años en que iba a la universidad, dejé de sentir ese síndrome: durante 5 años trabajé de Socorrista y monitora de natación por lo que el síndrome no aparecía en todo el año. No obstante no te recomiendo para nada esta solución con tu equipo, no por nada, sino porque me la juego a que en muy poco tiempo te quedarías sin equipo. 

Para que entendamos nuestra forma de vivir los procesos y los de nuestro equipo es útil partir de la idea de que en vacaciones establecemos ciertas rutinas o rompemos con algunas otras que nos hacen pensar que son uno de los mejores momentos del año. Y sí, las vacaciones son un tiempo genial, pero un tiempo que dejaríamos de valorar si siempre estuviéramos de vacaciones. El hecho de volver a la rutina del trabajo, a gastar energías, organizarnos, planificar, estresarnos en algunos momentos, a reencontrarnos con nuestros compañeros, etc. nos enriquece mucho más de lo que pensamos. Te puedo asegurar, que trabajar es mucho más saludable de lo que mucha gente piensa…eso sí, siempre y cuando nos acompañe un buen líder.

Sea como sea, compartiré contigo algunas ideas para hacerles más fácil y agradable la vuelta al trabajo a tu gente.

PAUTAS PARA FACILITAR LA VUELTA AL TRABAJO…

1. Correo previo con positividad: un par de días antes de que vuelvan al trabajo seguro que ya han empezado a sentir esa depresión postvacacional. Justo en ese momento (…y no antes!!!!) sería útil enviarles un correo de “rebienvenida” en el que nos comprometamos a hacer lo mejor que podamos nuestro trabajo para hacerles las cosas fáciles.  

2. Ser ejemplo de buena actitud en la “vuelta al trabajo”: en muchos casos es el propio líder quien refleja sus pocas ganas de volver al trabajo con su cara de agobio, con su comunicación, mostrando poco empuje o incluso formulando distintos tipos de quejas. Para evitar ese contagio no hay mejor solución que el líder vuelva con ganas, con muchas ganas.

3. Reunión individual:una reunión con cada uno de tan solo unos minutos puede darnos mucha información de las condiciones físicas y emocionales con las que vuelve cada persona. En esta reunión informal podemos ver qué tal han ido las vacaciones, cómo vuelve, qué espera de este año, si ha vivido algo en particular durante las vacaciones, etc. y con ello recoger información útil para planificar las siguientes semanas. 

4. Dejarles el primer día algún detalle a cada uno en su área, mesa, etc.: puede ser una frase motivacional, una planta a la que cuidar durante el año, un chupa-chups o incluso un chiste, sea lo que sea algo que les arranque una sonrisa y que les haga sentir que hemos pensado en ellos antes de que llegasen a su puesto de trabajo. 

5. Comida o almuerzo informal para ponerse al día de vacaciones: el primer día puede resultar interesante ayudarles a romper el hielo que se va creando durante el tiempo no compartido con los compañeros. El simple hecho de crear un almuerzo informal ayuda a que se rompa más rápidamente el hielo y a que se reactiven las relaciones que existían entre ellos.

6. Dar cierta flexibilidad de horarios: siempre y cuando nos lo podamos permitir por las características de la empresa, podemos dejar algo más de libertad en los horarios de inicio y de fin para que puedan hacer una adaptación progresiva. En el caso de que encaje en nuestro modelo de empresa, podemos hacer que alguna hora la trabajen desde casa a su ritmo.

7. Facilitar la conciliación de su vida personal con la primera semana de trabajo: aquellos que tienen hijos pueden encontrarse con la situación de que todavía no han empezado sus clases por lo que una simple idea como facilitar una canguro esa semana en la empresa puede suponerles una motivación y un ahorro sustancial en gestiones extras que necesiten.

8. Motivarles a proponer cambios: después de alejarse unos días del trabajo se ven las cosas con otra perspectiva por lo que es útil ofrecer la oportunidad de proponer cambios en la gestión, en procesos, en formas de trabajo, etc. que se puedan materializar en esta nueva etapa laboral.

9. Buscar alguna lectura o artículo que hable de lo positivo de volver a nuestras rutinas: podemos compartir con nuestro equipo alguna lectura, vídeo o material interesante que les haga valorar todos los beneficios que puede tener volver a las rutinas de comida, de deporte, sueño, etc. sobre nuestra propia salud física y psicológica.

10. Dejar que desde ya se preparen futuras vacaciones, viajes, etc.: creo que en este momento de mi vida puedo presumir de un equipo motivado, con ganas de trabajar, con capacidad de dar todo de sí mismos ante el cliente. Nuestro trabajo tiene épocas y picos de mucha intensidad por lo que intento hacerles siempre una promesa: “lucho y lucharé porque cada puente, cada día festivo, cada momento especial en vuestras vidas, estéis libres de trabajo para celebrarlo”. Puede ser útil crear esta filosofía para hacer más agradable la vuelta al trabajo, ¿no crees?

TAREA DE LA SEMANA: Posiblemente no apliquen todas las pautas que te expongo a tu trabajo. Es posible que tengas restricciones de horarios, de posibilidades o de cualquier cosa pero seguro que encuentras entre todas estas pautas una que puedes llevar a cabo. ¿Qué tal si empiezas por una que elijas?