Líderes felices: Hábito 9
Líderes felices: Hábito 9
¿Te has encontrado alguna vez con esa sensación de no saber por dónde empezar? ¿Te has visto ante un papel en blanco sin saber cómo empezar a escribir? ¿Te imponen los inicios de un proyecto?
Igual eres de los que se lanzan sin más, sin pensar. Igual eres de los que no sienten ningún respeto o pereza a la hora de desarrollar algo desde 0, pero en el mundo de los «humanos» te puedes encontrar muchas personas que procrastinan para no enfrentarse a crear desde la nada.
Los líderes felices también sienten la tentación de procrastinar en ese tipo de situaciones, pero habitualmente su fuerza de voluntad suele ganar la partida. Hoy compartimos contigo el hábito 9 y algunas ideas para llevarlo a la práctica:
HÁBITO 9. “El papel en blanco les da miedo pero a la vez les supone un reto: un líder feliz también siente respeto ante un papel en blanco cuando tiene que trazar un proyecto, una iniciativa o cualquier asunto laboral pero a la vez le atrae “romper el blanco” y empezar a crear cualquier tipo de proyecto desde 0”.
A continuación te damos algunas pautas que a ellos les hacen más fácil crear proyectos desde 0:
– Pillarse a sí mismos procrastinando: un punto esencial para no dejar las cosas más tiempo del que deberías sin hacer es ser consciente de que ya se han dicho al menos un par de veces frases tipo «empiezo mañana«, «ahora no es el momento perfecto» o «después me pongo«.
– Empezar por lo que menos le gusta: un líder de este tipo es capaz de organizar una lista de tareas de lo que menos le gusta hacer a lo que más y sorprendentemente es capaz de autoliderarse para empezar desde la primera, la que más pereza le da.
– Sabe que las tareas que menos le gustan son las más importantes: en muchas ocasiones las tareas que más nos resistimos a hacer justo son las más necesarias y trascendentes en nuestro trabajo, por lo que un líder de este tipo es capaz de empezar por esas tareas.
– Marcarse tiempos limitados: para no tener la sensación de empezar con algo muy extenso, se pone pequeños retos en los que se dice a sí mismo: “voy a dedicar a este proyecto ahora solo 20 minutos”. Esto le permite darse cuenta de que lo que cuesta es mucho más el inicio que no el proceso de desarrollo en sí.
– Empezar por algo simple: Un líder de este tipo sabe que lo importante no es hacerlo todo de una sentada, sino que a veces lo que más cuesta es poner la primera frase. Hay veces que se sienta ante el proyecto con la única intención de ponerle un título, de crear un guion o de escribir la primera frase. Curiosamente después de esto, a veces sin más, se encuentra a sí mismo desarrollando y avanzando el proyecto.
– Comprometerse con alguien: intenta comprometerse no solo consigo mismo sino que busca a alguien externo porque sabe que el simple hecho de darle la palabra a alguien, le permitirá mantenerse en su objetivo y dará los correspondientes pasos hacia adelante.
– Disfruta de aprender: Un líder de este tipo intenta conectar siempre con el disfrute de aprender, de investigar, de saber algo nuevo o de simplemente mejorar en cualquier aspecto y esto le permite añadir un plus a su trabajo.
RETO DE LA SEMANA:
Esta semana vas a ponerte en marcha con una de estas pautas para sentir que el inicio de un proyecto no solo es indecisión, dudas y miedos sino que también puede estar repleto de sensaciones que te conectan con el aprendizaje y el descubrimiento.
¡Nos vemos la próxima semana!
